¿Qué es ser un narcisita?
Cuenta el mito griego que Narciso sólo era capaz de amarse a sí mismo y despreciaba el amor de los demás. Por eso fue castigado por los dioses a quedar prendado de su propia imagen reflejada en una fuente, de la que quedó tan prendado que se ahogó al precipitarse en ella. Las personas narcisistas suelen ser personas encantadas de haberse conocido. O al menos, eso aparentan. Pero debajo de una personalidad con rasgos ególatras o narcisistas suelen esconderse otras cosas. ¿Eres narcisista? Probablemente si lo eres no mostrarás una gran predisposición a reconocerlo, o lo harás a tu manera.
Desde Vivat, tu gabinente de psicólogos en Oviedo hoy vamos a aproximarnos a alguno de los rasgos que definen una personalidad narcisista con efectos tóxicos en una relación ya sea de pareja, de amistad o familiar.
1. Todos tienen un pasado que les ha moldeado.
Una persona narcisista suele arrastrar un pasado de contrastes. O bien porque han sufrido abusos, vejaciones o cualquier otra forma de menosprecio que les haya obligado a rearmarse – en exceso – para reafirmar su personalidad frente a los demás. O bien, porque – todo lo contrario – han sido consentidos hasta el extremo, siendo objeto permanente de alabanzas y sin haber conocido nociones o pautas sólidas de respeto y empatía que les hayan sido impuestas durante su educación.
2. Nunca reconocen sus errores y embaucan con su conversación.
Pueden ser muy aduladores, educados y encantadores. Sobre todo en un principio al poco de conocerles. Se muestran seguros y tienen opiniones aparentemente sólidas sobre todo. Pero un rasgo distintivo es que nunca asumirán ninguna falta como propia y siempre tendrán una excusa a punto para todo lo que se les pueda reprochar.
3. Son manipuladores.
La técnica de los narcisistas perversos consiste en seducir en un primer momento para ganar ascendente sobre sus víctimas, ya sean pareja o amistades. Después, una vez nos conocen lo suficiente, aprovechan toda la información recibida para urdir su trama de manipulación y supremacía. La verdad no suele ser un obstáculo ante el que se arredren si existe una alternativa más interesante y acorde con sus objetivos.
4. La inestabilidad emocional está siempre detrás.
A pesar de mostrase seguros y a menudo despectivos hacia todo aquello que no les interesa, la inestabilidad es un trasfondo de las personalidades narcisistas. Suelen ser personas variables, caprichosas y con cambios de humor repentinos.
5. Proyectan su baja autoestima hacia el exterior.
A esa inestabilidad emocional muchas veces se le une la baja autoestima. Una baja autoestima que, lejos de hacerles apocados, proyectan siempre hacia afuera. Degradando o menospreciando a quienes les conviene o quienes conocen sus debilidades. No obstante suelen ser personalidades complejas que, debido a su frialdad e inteligencia son capaces de fingirse vulnerables para atraer a otros.
Desde Vivat trabajamos en todo tipo de terapias para adultos en nuestra consulta de psicólogos en Oviedo. Te ayudaremos a detectar personalidades nocivas que estén en la base de otros problemas.
