El próximo cambio de horario y el acortamiento de las horas de luz vespertina suelen tener consecuencias en nuestro estado de ánimo. La vida y actividad en exteriores tiende a reducirse y a veces también el contacto social. Por eso en esta época resulta más frecuente que algunas personas sientan con cierta intensidad un aislamiento que les entristece. Algo, desgraciadamente muy habitual en las personas mayores.
Sin embargo, sentirse solo no es algo extraño. De hecho es una emoción que casi todo el mundo siente en uno u otro momento. Y esto no implica por sí mismo ninguna clase de trastorno desde el punto de vista psicológico.
Mientras que en otro artículo aludíamos a las causas de la sensación de soledad, en este vamos a abordar pequeños remedios para paliarla. No obstante, conviene recordar que la soledad, en su justa medida, puede ser saludable. De hecho, suele utilizarse la expresión soledad no deseada para referirse a esas emociones vinculadas a la tristeza y asociadas a los efectos que el aislamiento social o la falta de contacto o interacciones con otros semejantes generan en las personas.
A continuación proporcionamos algunas recomendaciones para canalizar esas situaciones y no dejarse llevar por el abatimiento ante las emociones que puedan llegar a despertar.
Reorientar los pensamientos negativos
Como veíamos antes, el ser humano, ser profundamente social, también necesita sus momentos de soledad. De esta forma, conviene analizar la soledad en sí misma no como algo negativo, sino como una oportunidad. El tiempo en soledad puede ser una ocasión para reflexionar o conectar con uno mismo o dedicarse a actividades remuneratorias que se llevan a cabo mejor en soledad: leer, escribir, tocar o escribir música, etc.
La clave estaría, en resumen, en comenzar a asociar el tiempo en soledad con sus aspectos positivos en vez de con los negativos.
Escribe un diario
La escritura es un ejercicio que contribuye a poner en orden nuestros pensamientos y sentimientos. Es una herramienta muy recomendada por psicólogos y terapeutas en diversas situaciones. Y es que un dirario íntimo puede ser una buena idea para autosincerarnos además de combatir los momentos de soledad no deseada. Sin perjuicio, claro está de poder compartir nuestros escritos con amigos o familia en un momento posterior. Además de sus efectos terpéuticos, si dejamos salir nuestras preocupaciones y emociones para darles forma escrita, aunque durante el proceso pueda resultar doloroso, a la larga notaremos un alivio notable .
Ponte en contacto con amigos
Conectar con amigos puede, como es natural, ayudarnos a sobrellevar la sensación de soledad. La amistad favorece el intercambio de favores y la mutua comprensión. Poder estar con alguien y ser uno mismo nos pondrá en contacto con emociones positivas y ayduará a disipar los sentimientos de tristeza o aislamiento. Contar con una red de apoyo es muy imporante en psicología, pero no basta con disponer de amigos o familiares en la distancia si no recurrimos a ellos en momentos de necesidad.
De este modo, ponernos en contacto con ellos nos permite sentirnos acompañados y valorados, paliando la sensación de soledad por la que podamos estar atravesando en ese momento.
Ve a dar un paseo acompañado
Caminar y hablar tienen efectos sorprendentes en el estado de ánimo. Invita a un amigo o familiar a pasear contigo cada ciertos días y notarás una mejora más que apreciable en tu estado emocional. Prueba a cambiar las rutas y los horarios y así evitarás también todo sentimiento de rutina. Además, el ejercicio aumentará tus endorfinas, lo que mejorará tu humor y estado de ánimo general.
Habla con gente
Según el experimento de la BBC «The BBC Loneliness Experiment«, llevado a cabo por esta cadena y la Universidad de Manchester, el contacto con desconocidos puede paliar la sensación de soledad siguiendo una serie de claves.
Entre otras, recomiendan: iniciar una conversación con cualquiera, buscar algo bueno en toda persona que conozcamos, no tener miedo del rechazo y, también, simplemente decirle a alguien que nos sentimos solos. Puede parecer atrevido pero muchas veces funciona. Y es que apelar a la empatía del otro, aunque sea un desconocido, es menos descabellado de lo que parece, pues todos hemos sentido algo parecido alguna vez.
Únete a una comunidad
En el estudio anteriormente citado se afirmaba también que unirse a alguna clase de club o actividad tiene efectos muy positivos para el ánimo de aquellos que se sienten solos. Deporte, voluntariado, hobbies…cualquiera de ellos puede servir para paliar la sensación de soledad.
Mascotas
La mayoría de personas que conviven con una mascota estarán de acuerdo en que les hace sentir menos solos. Las mascotas dan algo en que pensar más allá de uno mismo y, además de su compañía, nos ofrecen una razón para salir de casa en el caso de los perros.
Si te decides por adoptar una, antes debes asegurarte de que estás dispuesto a asumir los costes y las responsabilidades que ello implica.
Busca ayuda profesional
En caso de que incluso siguiendo estos consejos el problema persista, es aconsejable que acudas a profesionales cualificados. Si notas que la tristeza no es pasajera sino que se agrava, pedir cita con un psicólogo puede ayudarte. La soledad puede dar lugar a depresión, y es importante abordarla antes de que la situación se complique.
Para ello, no dudes en contactar con nosotros. En Vivat Psicólogos tenemos una amplia experiencia tratando este y otros problemas.
