El acoso escolar ha vuelto a asomarse a la actualidad recientemente tras el lamentable suicidio de Diego, el niño de 11 años que se despedía de sus padres con una emotiva nota: «no aguanto ir al colegio»
Es esta una realidad, por desgracia, demasiado presente en el día a día de los colegios españoles y bien conocida en el día a día de los psicólogos, que sólo aflora esporádicamente en forma de trágicas noticias como la comentada.
¿Cómo saber si un niño sufre acoso escolar?
Desde el punto de vista de la psicología para niños, existen algunos fenómenos que nos deben poner en guardia. He aquí alguno de los síntomas más reveladores:
- Anomalías en el comportamiento cotidiano o cambios de humor inexplicables
- Crisis de llanto o decaimiento y tristeza habitual
- Alteraciones del sueño: pesadillas, insomnio…etc.
- Apatía, falta de apetito frecuente.
- Falta de atención o despistes continuados: olvidos o pérdidas de sus efectos personales o material escolar
- Presencia de hematomas o rasguños a los que es reacio a dar una explicación o atribuye a caídas o accidentes.
- Reticencia a salir, hacer actividades o relacionarse.
- Rechazo a la idea de ir al colegio.
En general, se trata de detectar una realidad que tanto los acosadores como el acosado tratan de ocultar. El acosado bien por vergüenza o para evitar represalias futuras. Y, algunas veces los profesores o el propio centro, para no poner al descubierto deficiencias en el cuidado o atención de los niños. En Vivat ofrecemos un servicio integral de apoyo a menores, para ésta y otras situaciones similares o derivadas, que como psicólogos en Oviedo nos hemos visto obligados a atender más de una vez
Es esencial que el menor perciba que no está solo, y que los problemas que pueda padecer en ningún caso son culpa suya, que tienen una solución eficaz y que puede contar con el apoyo de personas mayores para llevarla a cabo. Y es que ya lo decía el Mahatma Ghandi:
“Lo más atroz de las cosas malas de la gente mala es el silencio de la gente buena”